Justicia... ¿Divina?

Ojos de rabia, lágrimas de impotencia. Certeza de saber que matarías a alguien sin pensarlo dos veces. Mi cabeza se sobrecarga y explota en llanto, gritos y golpes contra la pared. Incertidumbre de saber que podría pasar "eso" cualquier día. Pero te seguiría... Te seguiré.
La vida es asquerosa, el mundo una pocilga. No, los cerdos no merecen tal calificación. Ojalá pudiera tenerle frente a mí... Saber quién fué.

Quién cambió para siempre aquella vida ajena. Me gustaría encontrarmelo...
No hay castigo suficientemente justo. Mas la sed de justicia me pide sangre... desearía ver la suya entre mis dedos. Hundirlos en sus ojos, hacerle sufrir hasta volver reversible al pasado.

Cortarlo... Una herida por cada lágrima que hizo derramar. Me faltaría piel. Jamás habrá para un ser así castigo expiatorio, pues el tiempo es unidireccional. Aún así, lo mínimo que debería estar es a trozos. Cuanta maldad en una sola noche... Ni siquiera eso, unas pocas horas.
Tamañas consecuencias de tamaña invasión ajena. Todo mi cuerpo, del corazón a la cabeza, anhela su sangre por el suelo, deshojarlo como a una margarita. Arrebatarle cualquier atisbo de esperanza o futuro. Arrancarle pedazo a pedazo su carne putrefacta y vomitiva. Golpear su cuerpo hasta hacerle escupir sus entrañas... Su verdadero aspecto.

Y aún así, no sería justo castigo.
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Esta es una "mini" entrada que escribí apresuradamente en el movil, hace mucho tiempo. Tenía ganas de subirla desde hace bastante, y por fin, aquí está.

Desde mi cielo

Ahora que está todo en silencio
y que la calma me besa el corazón
os quiero decir adiós
porque ha llegado la hora
de que andéis el camino ya sin mi,
hay tanto por lo que vivir…
no llores cielo y vuélvete a enamorar
me gustaría volver a verte sonreír.

Pero mi vida
yo nunca podré olvidarte,
y sólo el viento sabe
lo que has sufrido por amarme…
Hay tantas cosas
que nunca te dije en vida
que eres todo cuanto amo
y ahora que ya no estoy junto a ti…
te cuidaré desde aquí.

Sé que la culpa os acosa
y os susurra al oído: “pude hacer más”
no hay nada que reprochar.
Ya no hay demonios
en el fondo del cristal
y solo bebo todos los besos
que no te di.

Pero mi vida
yo nunca podré olvidarte
y sólo el viento sabe
lo que has sufrido por amarme…
Hay tantas cosas
que nunca te dije en vida
que eres todo cuanto amo
y ahora que ya no estoy junto a ti…
Vivo cada vez que habláis de mí
y muero otra vez si lloráis,
he aprendido al fin a disfrutar
y soy feliz.

No llores cielo
y vuélvete a enamorar…
Nunca me olvides
me tengo que marchar.

Pero mi vida
yo nunca podré olvidarte
y solo el viento sabe
lo que has sufrido por amarme…
Hay tantas cosas
que nunca te dije en vida
que eres todo cuanto amo
y ahora que ya no estoy junto a ti…

Desde mi cielo
os arroparé en la noche
y os acunaré en los sueños
y espantaré todos los miedos…

Desde mi cielo
os esperaré escribiendo
no estoy solo pues me cuidan
la libertad y la esperanza…

Yo nunca os olvidaré.
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Hola, queridos lectores. Lo que acabáis de leer es lo que debería leer (y escuchar) todo aquel que piensa, sin pararse a mirar, que los cantantes de "heavy" son unos locos drogados que solo rompen guitarras y llevan el pelo largo. Me parece que nadie puede negar que esta letra es como poco, escalofriante. Es del grupo "Mago de Oz", pertenecientes al género de música ya mencionado.

Sólo la interpretación del artista es comparable al mensaje que guarda, pues esta letra esta dedicada al anterior cantante del mismo grupo, que falleció. Cada vez que la escucho se me eriza la piel... Opino que nadie debería prejuzgar nada sin antes asegurarse de lo que dice.

A continuación os dejo el video, por si quereis escucharla despues de haber leido la letra.

http://www.youtube.com/watch?v=uryAOJj-v4k

Tiempo

La magnitud física más caprichosa. Nunca sabes como actuará… puede hacer las horas eternas, o arrancarte de cuajo algún momento especialmente agradable. Como una hoja caduca que se resiste a caer, el tiempo suele actuar en contra de nuestra necesidad. Si llegas tarde a una cita, puedes correr cuanto quieras que jamás alcanzarás al tiempo, y si por otro lado te ves obligado a esperarlo, comprobarás con asombro cuanto puede llegar a durar cada minuto.

Me encantaría poder coger cada hora, cada minuto y segundo, y estirarlo o contraerlo a placer. Sería maravilloso poder avanzar alguna que otra semana, o alargar una tarde tanto como se guste. Odio que mis manos solo puedan ser guiadas por sentimientos negativos. Ahora que me siento sólo y que padezco las inclemencias del tiempo (no me refiero al atmosférico) mis dedos parecen trazar una coreografía que desconozco, sin freno ni medida. Borro una y otra vez frases que no me gustan, hace rato que siento que he dejado de decir nada.

Nunca juzgues a NADIE en cuya situación no te hayas visto… Dios, que gran verdad.

Ni una lágrima. Muerdo mi lengua para reprimirlas mientras te veo ir, ya de nuevo el tiempo me muestra su lado más amargo. No te llevarás esa imagen, no esta vez... Insoportable sensación saberte lejos, e impotencia la mía de ver en el calendario cuanto durará el distanciamiento. Repito, a mis adentros, una y otra vez… tan solo es una semana, solo 7 días y se acabó, tras 168 horas podré mirarte.

Desafío al tiempo, yo venceré.

Cruda realidad

No sé, estimado lector, qué te parecerá este texto. Intenso, franco, directo y estremecedor es lo que me parece a mí. Por supuesto, me gustaría dedicarle una enhorabuena a su autora, una gran amiga. No me canso de leerlo y releerlo...


Envuélvete en las melodías que la vida te traerá
con el paso del tiempo y el piar de los pajarillos...
y aprende de ellos, que un día te haran fuerte
para poder soportar esta realidad que tus ojos no ven,
por estar cubiertos con un velo de mentiras
hasta que un día se desgarre y puedas ver y padecer
lo que es la vida de verdad.


Por: Mª Carmen Lopez Peñalver